Entrevista con Luis Oliveros: Lecciones internacionales de la pandemia

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Imagen: Diario de Lara La Prensa

Por: María Eugenia García y Jesús Martínez

Caracas, 20 de julio de 2020

Los puntos de vista aquí expresados son propiedad exclusiva del entrevistado y no necesariamente reflejan la opinión de Ceteris Paribus.

Yo creo que más allá que verle todo lo malo a esta situación (…) también tenemos que verle las cosas buenas de lo que estamos aprendiendo”- Luis Oliveros.

A principios de año, posiblemente nadie, ni siquiera las organizaciones internacionales, estaban en la capacidad de prever que este nuevo virus surgido en China causaría en poco tiempo una crisis de tal envergadura que nos obligaría a mantenernos aislados en nuestras casas y que paralizaría la economía mundial. De hecho, para la historia moderna de la humanidad esta pandemia representa una situación sin precedentes ante la cual hemos tenido que, sin lugar a duda, reinventarnos tanto desde lo político, como lo económico, social y cultural. Por estas razones se hace imperante preguntarse ¿qué podemos aprender de esta pandemia tanto ahora como en el período subsiguiente? ¿qué estrategias están aplicando los países para adaptarse a este nuevo panorama? Para tratar este tema tan interesante, hemos entrevistado a Luis Oliveros. Reconocido economista egresado de la Universidad Central de Venezuela, máster en Gerencia Financiera, con especializaciones en Política y Comercio Petrolero y Finanzas Internacionales, así como docente en su alma máter y en la Universidad Metropolitana ubicada en Caracas. Oliveros además es columnista en el periódico El Nacional desde donde se dedica al análisis de temas económicos de actualidad.

¿Cuáles serán los países más afectados económicamente por la pandemia y en qué posición quedarán los países latinoamericanos en el contexto mundial?

Con respecto a los países más afectados económicamente por la pandemia, según los últimos informes del Fondo Monetario Internacional, del Banco Mundial y de la Cepal y de varias firmas de inversión globales apuntan a que no solamente vamos a una recesión mundial, sino que en esta recesión la caída del PBI mundial va a ser superior a 5 puntos del PIB. Esto es una caída que no se veía desde la “Gran Recesión”. En segundo lugar, cerca de 100 países han acudido al Fondo Monetario Internacional a pedirle a ayuda no solamente en dinero, sino también en soporte para emisiones de bonos, un conjunto de cosas. Y se habla de que la ayuda del Fondo Monetario a estos países pudiera estar entre 12 y 15% del PIB global, eso es un poco para poner en perspectiva la dimensión de la crisis actual en la cual estamos sumergidos.

Indudablemente esta es una crisis que está afectando a todos los países del mundo. Prácticamente todos los países del mundo. Vemos como en Estados Unidos la proyección es una caída de 8% del PIB, pero ciertamente pareciera que los países que dependen de materias primas por la disminución en la demanda de materias primas verán una caída superior en el PIB. Pero sobre todo los países que dependen del turismo pareciera que van a ser los más afectados. Por ejemplo, los países caribeños que dependen de lo que son los cruceros.

Los mismos países europeos, en cuyo PIB, el sector turismo es un porcentaje importante. A nivel global está entre el 8 y el 9% del PIB mundial. Ahí también tenemos un sector que se va a ver muy comprometido, porque pareciera que lo que es este sector y el sector entretenimiento son prácticamente los últimos que tal vez van a liberarse en el mundo, entonces pudiéramos estar hablando de países que dependen del comercio, de materias primas, países del turismo, pero en general la pandemia ha generado, está generando y va a generar muchos problemas. Y esto es suponiendo que no vamos a tener una segunda ola o la segunda o tercera ola y que no van a ser tan fuertes y no van a generar lock down como lo tuvimos el primer trimestre del año donde cerca del 70% de las economías del mundo estaban cerradas. Entonces eso suponiendo una recuperación medianamente normal, donde la segunda y tercera ola no van a ser tan fuertes como la primera ola de la pandemia.

¿Cuáles políticas están siendo aplicadas actualmente para minimizar los efectos de la paralización de las economías?

En la mayoría de los países del mundo, y ahí tenemos que incluir también a los países de América Latina, con excepción de Venezuela, pues Venezuela no está prácticamente generando o llevando a cabo políticas para ayudar a las empresas y a las personas, son varias las que se están llevando a cabo, políticas de impulso, políticas tanto fiscales como monetarias, paquetes de ayuda a las empresas y también a las personas. Uno de los casos más emblemáticos es el famoso cheque de más de mil dólares que Estados Unidos le mandó a buena parte de la población, y las familias en general, para tratar de ayudarlas en este momento donde buena parte de la población estaba en su casa y no podía generar ingresos.

Pero, por ejemplo, en muchos países hay recortes de impuestos, hay disminución de la presión tributaria también en las personas, disminución de los cargos de servicios públicos, así como, períodos que no tienen que pagar lo que son los intereses o los pagos a capital de los préstamos (préstamos blandos), préstamos con intereses muy bajos o préstamos que bancos privados otorguen a empresas, pero con el aval del Gobierno, paquetes de estímulo de ayuda, incrementos en la oferta monetaria para tratar de incentivar el PIB de estas economías. Hay toda una literatura, pero sobre todo hay muchísimas políticas y muchísimas ideas, muchísimas opciones que han llevado a cabo la mayoría de las economías del mundo para tratar de ayudar a las empresas y a las personas en este momento tan complicado.

¿Cuáles políticas considera usted que utilizaran los gobiernos después del confinamiento para reactivar las economías?  ¿Mayor emisión de deuda? ¿Subsidios? ¿Subvenciones? ¿Política monetaria expansiva?

Yo creo que debe ser una combinación de ambas. Muchos países han dicho que van a tolerar más inflación para poder llevar políticas monetarias expansivas. Estamos hablando que la inflación del mundo está cerca del 4%, tal vez aumente a 4,5%, máximo 5%, para que tengamos un poco la idea del problema inflacionario entre comillas que hay en el mundo actualmente. Solamente Venezuela, Zimbabue, Argentina y Sudán son los que tal vez tienen problemas inflacionarios actualmente.

En América Latina, por ejemplo, hemos visto como Chile anunció estos programas fiscales muy, muy interesantes. Perú está también anunciando un programa fiscal de más de 10 puntos del PIB, Panamá salió a emitir deuda, Paraguay también. En Colombia ha dicho su Banco de la República que va a ser tolerable y va a ser más permisivo con su política monetaria porque tiene espacio para hacerlo. Esa es otra de las de las grandes incógnitas, ¿Qué espacio fiscal tienen los países o los que tienen fondos de estabilización o fondos de inversión o fondos de ahorro? ¿qué pueden utilizar para esto? Y ciertamente América Latina para nada es el paraíso con respecto a espacio fiscal, pero muchos de estos países como Chile, Perú, Bolivia, Colombia, Paraguay y Uruguay tienen espacio en su presupuesto para llevar a cabo ayudas importantes al sector privado de cara a los efectos tan nocivos y tan complicados de lo que es el Covid-19.

Y también están los organismos multilaterales, el caso del Fondo Monetario, el Banco Mundial, del Banco Interamericano de Desarrollo, que también están dispuestos a ayudar en esta etapa tan rara, donde el mundo prácticamente no veía una pandemia desde hace 100 años. También podemos estar viendo más subsidios a las empresas, pero la idea es tratar de generar crecimiento económico, tratar de reactivar su economía. Una de las cosas que más se habla es tratar de reactivar lo que son los sectores manufactureros, que son sectores que agregan mucho valor a la economía, pero que también generan mucho trabajo y eso es otra de las cosas que se está buscando, que los niveles de desempleo no aumenten de manera importante, porque si no, esto genera más problemas la economía, pobreza, etc.

¿Considera usted que los países optarán por proteger más sus economías o seguirán apostando por abrirse a los beneficios de la globalización? ¿Qué cambios se evidenciarán en sus políticas comerciales y cambiarias?

Ciertamente hay mucho miedo con respecto a esto de proteger más las economías y tratar de generar crecimiento, tratar de buscar cómo desde el punto endógeno, generar más crecimiento protegiendo tu economía. Sin embargo, pareciera que se ha hecho bastante lobby. Los principales economistas en el mundo están hablando de este tema, diciéndole a las personas que toman las decisiones de las economías que cerrarse más no implica generar crecimiento económico y empleo, sino que, si te abres más, la frontera de posibilidades de producción por el consumo agregado puede ser mucho mayor. Ciertamente y ojalá que entre los países se entienda la necesidad de la apertura económica, de mantener la apertura económica y de mantener el comercio internacional en aras de que haya un mayor crecimiento económico

En cuanto a qué cambios se evidenciarán en sus políticas comerciales y cambiarias, yo creo que todavía estamos en plena crisis, pero los países europeos, ellos también están ayudados por el tema de la eurozona, pero pareciera que los países europeos han tomado las medidas adecuadas en el sentido de seguir aumentando el comercio, no cerrando sus economías y eso ojalá que también permee a las demás economías europeas, América Latina y, sobre todo, Estados Unidos y China.

China ha estado presionando para que la apertura económica de Europa y de Estados Unidos se mantenga para poder seguir colocando sus productos. Recordemos que China entró primero a la pandemia, pero ya salió de la cuarentena y tiene unos meses más adelante que los otros países en términos de producción y en términos de comercialización. Muchas economías europeas por el euro no lo pueden hacer, pero muchas otras economías tenderán a subvaluar sus monedas para jugar con su tasa de cambio, para tratar de hacerse más competitivos y encarecer sus importaciones. Mucha gente tiene ese miedo de que ocurra en América Latina, sobre todo, también en Estados Unidos. Ojalá que eso no ocurra por el bienestar del mundo en general, ya que con esta pandemia se estará evidenciando una caída muy importante. Espero que la recuperación sea rápida y no veamos, por ejemplo, un “movimiento en L”, donde hay una caída, luego una estabilización, pero con un nivel del PIB que sigue siendo bajo en comparación al inicio de la pandemia, sino que logremos una recuperación rápida.

¿Qué se prevé para el crecimiento económico mundial considerando que previo a la pandemia ya había señales de una posible recesión económica global?

El Fondo Monetario habla de una caída de 5 puntos en el PBI global. Estos son números realmente duros, realmente complicados, realmente difíciles. Por lo menos China a comienzos de año pensaba que iba a crecer 6%, luego de la pandemia se pensaba que iba a crecer 2,5 o 3%, ahora se da como bueno que crezca tal vez 1 por ciento.

En el caso de los países europeos igual, se hablaba de que tal vez iban a crecer 1 o 2%. Luego con la pandemia se pensaba que tal vez la caída iba a ser 5 o 6%, pero ya hay países que se está pensando que pueden caer 10 o 12%. En el caso, por ejemplo, de Alemania, se habla de entre 6 y 8% y Alemania es prácticamente el motor de lo que es la euro.

La India, que también es uno de los países que más contribuye al crecimiento económico, para abril de este año se pensaba que iba a crecer 2%. Ahora se piensa que va a caer 5%. En el caso de América Latina también, la caída promedio entre Chile y Brasil, Argentina era 5%, Colombia 2,5%, Perú cerca de 5%, ahora el promedio de todos estos países es cercano a 10 por ciento. Chile se habla de 7,5%, Colombia 7,8%, Perú casi 14%, Argentina y Brasil 10%. Para el caso de Venezuela, el mes de abril el FMI estimaba que la caída en el PIB seria de 15% y para el mes de junio de 20%. La Cepal habla de una caída de 26%. Yo estimo que mínimo 30%. Entonces, ciertamente son unas caídas muy fuertes. La zona euro se piensa que va a caer 10 por ciento del PIB. Estados Unidos 8%, Francia 12,5% y Italia 13%. Japón 6 por ciento. Es muy difícil lo que se está viviendo.

Con respecto a las señales de una posible recesión, yo creo que no había. Yo creo que tal vez no iba a haber una recesión, sino que iba a haber un crecimiento bastante mediocre. Luego, cuando llega la pandemia, se hablaba de tal vez 3% y ahorita se está hablando de 5% en escenario normal, en el que no ocurra una segunda oleada, en el que no ocurra otro rebrote de la crisis y que las cosas no empeoren.

¿Son las secuelas de esta pandemia comparables con la crisis del 2008 u otra crisis del pasado?

Cuando nos sentamos a analizar lo ocurrido en la crisis financiera de 2008-2009, vemos que ciertamente desde ese año el mundo no experimentaba una caída del PIB, pero en ese año la caída fue de 0,1% del PIB global y la recuperación fue bastante rápida porque la crisis estaba concentrada en el sector financiero. Ciertamente con paquetes de ayudas y políticas focalizadas en el sector financiero y en el sector bancario, más allá de lo difícil que puede ser recobrar confianza, se hicieron muchas cosas y se recuperó el PIB global de manera muy rápida.

El problema de la pandemia es que estás teniendo choques tanto de oferta como de demanda agregada. Entonces tienes que ponerte bastante creativo a la hora de llevar a cabo políticas, porque tienes que tratar de levantar el consumo de una población o de empresas que no están facturando y que no están generando ingresos. Pero, por otro lado, de compañías que estuvieron cerradas, que sus órdenes de compra han bajado de manera importante, que están teniendo problemas para producir, que tienen miedo de volver a los trabajos o tienen inconvenientes para volver al trabajo, porque todo lo que es el sistema de suministro global está teniendo innumerables problemas. Entonces, ciertamente es una crisis muy diferente y mucho más difícil de sobrellevar, porque la otra, a pesar de que fue una crisis financiera también global, no afectó la economía real de una manera tan fuerte como la está afectando esta crisis ahora de la pandemia 11-12 años después.

A nivel general, ¿Que lecciones económicas dejará esta pandemia en los países?

Ahora bien, con respecto a las lecciones económicas, en primer lugar, muchos de estos países (Japón ha sido uno de los primeros, Australia también lo ha dicho) hay que descentralizar un poco esa cadena de suministros. Es un aprendizaje, primero que nada. Segundo, estos episodios de cisnes negros*, que son muy raros de conseguir.  Estos episodios de cisnes negros, de pandemias, de unas cosas que uno veía en películas, o tal vez cuando estudiaba finanzas, sí pueden ocurrir y cuando ocurre tu empresa o tu economía debería tener algún tipo de preparación. En el caso de Venezuela, lo agarró, como decía Buffet, “el mar bajó y se vio quien estaba desnudo” y Venezuela era uno de esos de esos países que no estaba preparado para una pandemia, para un choque externo adverso. Ya tenía suficiente, habría que sumar esto.

Yo creo que a muchas de las empresas esto le ha servido para descentralizarse, para entender la importancia del teletrabajo, para entender que no tienes que tener en un edificio de, tal vez, 400 o 500 personas, cuando puedes tener una buena parte de esas personas trabajando desde su casa, donde tienes que a lo mejor hacer mayor y mejor inversión en el tema tecnológico, donde tienes que revisar los presupuestos y esta crisis muy posiblemente te ha orientado sobre dónde hacer esos ajustes y dónde gastar más y en qué personal gastar más y mejor.

 Donde tal vez se empieza a ver lo importante que es el teletrabajo, donde tal vez tener a estas personas trabajando desde su casa, trabajando a distancia es más cómodo, pueden ser más productivos, donde, por ejemplo, una reunión en Zoom, de todas estas personas puede llegar a ser mucho más eficiente que tenerlos en la oficina, trabajando y reuniéndose y tal vez lleguen tarde. Donde el inicio de la reunión puede llevarse mucho más tiempo por tal vez ponerse al día al trabajar, mientras que una reunión en Zoom no todos pueden ponerse a trabajar porque si no nadie va a entender y es muy difícil que se creen reuniones alternas.

Entonces, ciertamente creo que las empresas pueden salir fortalecidas, pueden salir más eficientes de esta pandemia, aparte de conocer muy bien los puntos débiles que tenía la empresa con esta pandemia. Hay quien dice, y yo creo que puede tener bastante razón al respecto en que, si tu empresa en este momento le está yendo muy mal o no estaba preparada para esta situación, es que estás teniendo problemas en el tren gerencial porque no estaban preparados para llevar la economía a la gerencia de la empresa o la salud de la empresa a situaciones complicadas como la que estamos viendo actualmente.

Entonces, yo creo que más allá que verle todo lo malo a esta situación, que de verdad hay cosas muy malas, también tenemos que verle las cosas buenas de lo que estamos aprendiendo de esta situación y que ojalá que esta pandemia pase, se consiga la cura, que podamos dar un paso adelante y todo esto que hemos aprendido podamos insertarlo en las empresas y en esta nueva gerencia de cara a los próximos años.  Y en el caso de los países, creo que la importancia en primer lugar de invertir en los servicios: los servicios públicos y los servicios médicos, es sumamente importante. Tener un servicio médico de primera línea que pueda hacer frente a situaciones como esta, creo que aquí se ve lo valioso de los países que hayan podido llevarlo a cabo o que lo estuvieran desarrollando.

En segundo lugar, el tema tecnológico, con mucha gente trabajando desde su casa, con mucha gente sin poder salir y buscando entretenimiento. El tema de una buena red de telecomunicaciones, de tecnología, internet, hoy por hoy es sumamente valioso y se le ve la importancia, sobre todo en situaciones como esta. Creo que los países deben aprender de este tipo de cosas. Bueno, y lo otro también es contar con espacio fiscal suficiente para cuando vengan choques externos, poder llevar a cabo las medidas adecuadas para ayudar a empresas y también a las personas en momentos económicos tan complicados, tan difíciles. Tener ese espacio fiscal, tener fondos de estabilización, fondos de ahorro o tener líneas de crédito abiertas con multilaterales. Tal vez no se necesita tener dinero represado en un fondo, sino una línea de crédito a tu entera disposición ante un escenario negativo como el que estamos viviendo ahora, pero ciertamente para los países es otro momento de entender la enorme necesidad de contar con una salud macroeconómica, una estabilidad macroeconómica y poder contar con recursos para hacer frente a esta situación, ayudar al sector privado y ayudar a tu población en estos momentos.

*Cisne negro

Un evento de cisne negro, una frase comúnmente utilizada en el mundo de las finanzas es un evento o evento extremadamente negativo que es increíblemente difícil de predecir. En otras palabras, los eventos del cisne negro son eventos inesperados e incognoscibles. El término fue popularizado por el ex comerciante de Wall Street Nassim Nicholas Taleb, quien escribió sobre el concepto en su libro de 2001 Fooled by Randomness: The Hidden Role of Chance in Life and in the Markets. De acuerdo con el autor, estos eventos tienen tres características principales: 1) son impredecibles, 2) tienen consecuencias graves y generalizadas y 3) después de la ocurrencia de un evento de cisne negro, las personas racionalizarán el evento como algo predecible (conocido como sesgo retrospectivo).

Referencias consultadas

Taleb, N. (2001). Fooled by randomness: The hidden role of chance in life and in the markets. New York: Random House.